martes, 27 de diciembre de 2011

Comenzamos...

son las 9 de la mañana a solo tres días de terminar el 2011. Supongo que es un día tan bueno como otro cualquiera para comenzar un blog sobre nulidades matrimoniales. Sinceramente, creo que no es justo que tantas personas con sus matrimonios rotos no sepan que quizá su matrimonio es nulo y que quizá pudieran rehacer su vida con un nuevo y verdadero matrimonio dentro de la Iglesia. Por eso comienzo este blog para contribuir en la medida de lo posible a la difusión de este servicio a los que muchos dedicamos muchas horas de trabajo y mucha ilusión.

6 comentarios:

  1. Animar a la gente a acudir al tribunál eclesiástico ha de ser el último recurso, la iglesia a través de sus ministros han de ayudar a esas paraejas "rotas" a reflexionar sobre el sentido que tomará su vida si dan ese paso.

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  3. me parece estupendo,la idea que has tenido de hacer este trabajo,desgraciadamente tengo bastantes amigos y amigas,separados,divorciados,que en algún momento deberían saber su situación por si pudiera ser nulidad matrimonial.
    saludos y Feliz Navidad y Feliz 2012

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  4. Eugenio, habrá que ver caso por caso, pero si un supuesto matrimonio no lo es y no están interesados en que lo sea, no creo que sea necesario remas a contracorriente. Otro caso es el del matrimonio que quiere separarse, a ese hay que darle todas las ayudas posibles.

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  5. Creo que me he equivocado,me refería más a las causas por las cuales se han divorciado ,si uno o una abandona a su conyuge,los motivos,,etc y como retomar una vida cristiana apartir de estas situaciones..más que a volver a casarse..después de ..una rutura matrim...saludos

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  6. Es claro que hay que ayudar a los matrimonios con problemas, claro que sí, incluso si están separados e incluso aunque estén divorciados -no faltan casos de matrimonios divorciados que vuelven a estar juntos y a casarse civilmente-.
    Otra cosa es la nulidad matrimonial.

    Cuando un matrimonio es nulo hay un derecho a saberlo y, por parte de la Iglesia, un deber ayudar, está en juego la validez de un sacramento y eso es algo muy importante.

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